EN BUSCA DE UN HOGAR

Al fin tengo en mi poder la portada de la novela acerca de la que les hablé, que lleva por título el señalado en la entrada, En busca de un hogar, y creo que va siendo hora de empezar a tomar aire, contar hasta tres, y lanzarme de cabeza a la piscina, lista para ahogarme o salir a la superficie. Cualquiera sea el caso, mi propósito es divertirme, compartirlo con mis amigos, y darme este gusto tan grande.

La novela está ubicada a fines de la Era Victoriana, uno de mis periodos favoritos de la historia, y es, antes que nada, una historia de amor. Como no puedo con mi genio, tiene variadas cuotas de humor, me encanta hacer interactuar a los personajes, las conversaciones rápidas y ágiles; a eso le sumo su buena cuota de intriga y unas cuantas maldades, que siempre vuelven todo aun más divertido.

Subiré la historia a Amazon estos días, posiblemente el fin de semana, en espera de que me avisen si no hay ningún problema, y mientras tanto, me encantaría presentarles a los personajes principales de esta muy querida historia. 

Juliet Braxton es una joven de origen estadounidense que vive en la Inglaterra de fines de la Era Victoriana junto a una abuela de férreo carácter, un tío amable, pero poco apegado, y un primo, por quien siente un profundo afecto fraternal. Su mayor ambición es regresar al que considera su hogar, en donde vivió una feliz infancia. 

Su primo, Daniel Ashcroft, hijo de Lord Ashcroft, quien siempre ha sido un fiel compañero de juegos, empieza a mostrar una inclinación amorosa hacia su prima que Juliet encuentra perturbadora, ya que no puede corresponderle.

Lady Ashcroft, abuela de nuestra protagonista,  muestra una férrea oposición a que cumpla su objetivo, el regresar al que considera su hogar, ya que pretenda casarla con, lo que se consideraba en la época, un buen partido.

Robert, Conde Arlington, vive en la tranquilidad del campo con su madre, la condesa viuda, una mujer activa, generosa, y que muestra adoración por su hijo; lo único que Robert encuentra intolerable, es la constante intervención de su madre en su vida, intentando convencerlo de que se case lo antes posible a fin de que le dé nietos.

He aquí a la encantadora y entrometida madre, la condesa Arlington, Elizabeth.

Lord Graham, un hombre que se siente profundamente atraído por nuestra protagonista, y a quien Juliet desprecia.

Bueno, después de leer esto, ¿les tienta? ¿Querrían saber más? Tengo pensado ir dejando caer algunos adelantos y desde ya, muchas gracias a quienes amablemente se ofrecieron a reseñar la novela.

Prometo volver con más novedades, y agradezco desde ya a las personas que se han sumado a la aventura, en poco más de una semana ya hay 41 personitas amigas presente y eso es maravilloso. Mil gracias.